El Pícaro restaurante-coctelería

Visitamos este restaurante por recomendación de unos amigos. Situado en calle de La Tapinería, Nº 9, se encuentra este amplio local de varias alturas y posibilidad de terraza.

Ambiente acogedor, sobretodo por la noche cuando se iluminan las lámparas hechas con capazos. La decoración corre a cargo del dueño, Fran, que a parte de buen gusto, es una persona muy amable. No tuvimos la suerte de ver el espectáculo de la ensalada quemada con soplete en la propia mesa porque nos enteramos más tarde de que existía esta posibilidad.

Pedimos de carta los siguientes platos:

- Morcilla de Burgos: morcilla de arroz sobre base de patata coronada con cebolla roja caramelizada. Punto de caramelización de la cebolla óptimo. La reducción de vinagre/vino que adorna el plato empaña el sabor de los ingredientes principales.

- Pulpo a las 5 pimientas: pulpo sobre base de patata espolvoreado con mezcla de especias. Octópodo con buen punto de cocción. Quizás se debería percibir más la presencia y el sabor de las 5 pimientas.

- Clóchinas al vapor: ricas y sabrosas. El plato que más nos gustó.

- Ciervo con salsa de setas: carne de sabor intenso, como cabe esperar del ciervo, acompañada de una salsa de champiñones. Aprobado justo.

- Cóctel de frutas tropicales: postre cubano según nos informó Fran, el dueño. Se trata de una selección de frutas que se aderezan con ron y canela. Ideal para los más arriesgados, aunque a nosotros personalmente no nos gustó.

El precio de estos platos superaba los 50 euros incluyendo 2 cervezas, 2 copas de vino y pan.

El Pícaro es un restaurante más bien dirigido al turismo pues permite degustar una fusión de platos: empezando por Cuba, pasando por una paella del mediterráneo que se puede servir incluso de noche, así como platos de interior como la caza.
Para más información: http://elpicarorestaurante.com/