El restaurante se halla en la primera planta del Hotel Diamante Beach Spa, un hotel vacacional de 4*. Respecto al local, acristalado con mucha luz natural y predominio de blancos en el mobiliario con la bodega visible en uno de los laterales.
Teníamos reserva para las 14:00. Destacar la amplia separación entre las mesas, y sillas cómodas, lo que es de agradecer. Exquisito trato por parte de Alex Danglerou, que dirige la sala con perfecta sincronía con la cocina. Mientras elegíamos, vermouth (Vall de Gorgos, B. Xaló) y manzanilla (Papirusa, Lustau). Disponen de carta y menús Moon River (35€) y Audrey's (55€). Elegimos el largo.
- Snacks: de derecha a izquierda: flor de calabacín con crema de erizo, dim sum de cangrejo, ñoquis de queso con caldo de calamar, capuccino de ceps.
- Caballaki con ácidos, amargos y picantes. Muy buen inicio. Conjunción de sabores con un pescado más que correcto.
- Gamba roja de Dénia con acelgas frescas, piñones y lima. En nuestro caso, gamba de Dénia con wasabi, lima y salsa americana. Poco puede decirse de este plato, de hecho lo probé antes de hacer la foto... Excelente.
- Arenque ahumado con cebolletas, harissa y café. Una preparación que ya conocíamos (aunque otra versión diferente) de Aticcook. Por ponerle un pero, se echa en falta más arenque.
- Ñoquis de sepia con cilantro y curry. El ñoqui de textura jugosa y con sabor. El curry central muy potente que puedes dosificar y refrescar con el cilantro. Un bocado exquisito de los que te deja una sonrisa .
- Parpatana de atún rojo con jenjibre y tomates simshi. De los que hacen afición.
- Dumpling de pato con cremoso de foie, trufa negra y setas. Conjunto de sabores potentes extraordinariamente bien resueltos.
- Arròs del senyoret 2.0. Uno de los mejores arroces que he probado. Arroz sabroso, en su punto de cocción, suelto, perfecto de sal y con una materia prima impresionante. ´
El plato se completa con una lámina crujiente de socarrat, un detalle creativo en un clásico.
- Cochinillo con calabaza asada y ras-el-hanut. Piel crujiente y carne jugosa y tierna. Especias árabes.
- Agua de Valencia con gajos de naranja, sorbete de mandarina y whisky. Una buena interpretación en forma de postre. Me pareció fantástico.
- Cho-co-la-te
- Petit fours. Excelente el macaron.
El pan está muy cuidado, presentan 2 hogazas artesanales y una coca que cortan en el momento: blanco fermentado con masa madre, de semillas y la mencionada coca de aceite y sal. Excelentes los tres. Acompañado con aceite Tot-Oli de la Vall de la Gallinera.
Servicio del vino, muy correcto con cristalería, Zwiesel, excelente. En nuestro caso optamos por el maridaje (20€). Los vinos que nos ofrecieron fueron:
- Santa Digna Chardonnay (Miguel Torres, Chile)
- Menade Ecológico Sauvignon (Menade, DO Rueda)
- Pasión de Moscatel (Sierra Norte, DO Valencia)
- Cullerot (Celler del Roure, DO Valencia)
- La Malkerida (Murciano & Sampredo)
- Cream Sherry (Bodegas Fernando Rey de Castilla)
En este nuevo proyecto Rafa Soler se ha rodeado de un equipo excelente y han cuidado hasta el último detalle: comodidad y confort en sala, cristalería y vajilla, servicio del pan, aperitivos (disponen de cervezas artesanas por ejemplo), servicio del vino, infusiones bien seleccionadas, y por supuesto su cocina que es un valor seguro.